La depresión en la Terapia Gestalt

Una situación es padecer depresión, y otra muy distinta, estar en ella, experimentarla, vivirla, sentirla y ausentarse de la vida misma y de la propia experiencia. (Ana Giorgana,2021)

La depresión es uno de los padecimientos que con mayor incidencia se presenta en la consulta. Un mal que va en aumento y que a raíz de la epidemia en este siglo XXI, ha cobrado fuerza en un mayor número de personas incluidos los jóvenes y los niños.

Las crisis familiares, las parejas, los entornos cerrados estrechos y limitantes para algunas personas han sido altamente traumáticas y cuyo ajuste creativo ha sido la experiencia depresiva, además, de que muchos de ellos, han tenido pérdidas significativas de familiares en esta pandemia global.

Toda depresión obedece a una ruptura, no solo a pérdidas sino a rupturas de una situación a otra. Así, por ejemplo, las condiciones de vida antes de la pandemia cambiaron de manera abrupta nos vimos obligados a realizar cambios drásticos en nuestra forma de vivir. 

“Mirar la vida a través de las gafas de la depresión es una condición dolorosa, sin ánimo, sin brillo, sin contrastes, sin figuras y fondos. La experiencia depresiva inmoviliza, intranquiliza, aniquila y las fuerzas y estima personal están en el fondo sosteniendo lo desteñido, la vulnerabilidad y la falta de alegría en el diario acontecer. Los días y las noches son iguales. Los matices no se perciben. Todo es igual, monótono, sin esperanza” (Ana Giorgana,2022) 

La depresión ha merecido estudios en todos los ámbitos de investigación del ser humano: la medicina, la farmacología, las teorías psicopatológicas, las neurociencias, los modelos cognitivo conductuales, los modelos sistémicos. Un gran esfuerzo profesional y científico se despliega para tratar de comprender este mal que sufre una gran parte de la humanidad. Para los límites de este artículo me centraré en la mirada gestáltica ante las experiencias depresivas.

La depresión o la experiencia depresiva

Existe una diferencia importante entre conocer todos los factores que componen una depresión como síntomas, signos, prevalencia, pronóstico y farmacología.

El terapeuta gestalt está centrado en la experiencia depresiva, en el deprimido no en la entidad patológica. Todo profesional preparado conoce estos para realizar un diagnóstico diferencia y evaluar sí requiere del apoyo de otros profesionales de la salud. 

El primer punto diagnóstico es valorar sí el paciente requiere o no de un tratamiento con fármacos para un mejor manejo de la sintomatología. Observar el estado clínico, autocuidado, tiempo de instalada la depresión, las áreas o campos relacionales que su padecimiento invade, así como las tensiones relacionales con su entorno y sí es la primera vez que la padece o es recurrente.

La depresión como patología cuenta con una serie de signos y síntomas para su evaluación, además de, diversas manifestaciones de adaptabilidad, pronóstico y funcionalidad. Las patologías se clasifican por tipos y encontramos desde la distimia hasta una depresión mayor o bien, un trastorno psiquiátrico como es la bipolaridad y de ahí, la importancia de conocer los alcances de la aproximación terapéutica e intervención.

La administración de fármacos mejora la sintomatología a través de reguladores del humor y para los terapeutas son un gran apoyo cuando así se requiere. Al ser controlados los síntomas existe una mejoría en la atención, concentración, periodos de descanso, etcétera.

” El Terapeuta Gestalt no puede desdeñar la integralidad de su actividad profesional, por tanto, sí consideramos una evaluación de otro profesional, es necesario considerarlo, ya que comprendemos que la experiencia es la única posibilidad de abordaje” (Ana Giorgana, 2022)

Desde este modelo gestáltico nos centramos en la experiencia deprimida de la persona que nos consulta. La depresión cuenta con una gran sintomatología, pero, ¿qué le pasa a la persona deprimida que tenemos frente a nosotros? ¿cómo vive su depresión? ¿cómo afecta su vida interna o externa? ¿de qué manera se deprime? 

Una acotación que me parece importante señalar:

“La persona que padece una experiencia depresiva es una persona que sufre, que siente dolor físico y emocional. Su estima personal y autoconcepto no le alcanzan para recuperarse. De debate entre lo que debería de ser y lo que está viviendo. Se recrimina, se lastima e impacta en su medio ambiente y en todos sus campos en los que se desenvuelve e interactúa” (Ana Giorgana,2022)

La experiencia depresiva y la Gestalt

1.- Para la Terapia Gestalt la conducta depende del campo. Por tanto, la experiencia depresiva depende del campo, de las relaciones y de los ajustes creativos que ese campo permite para su adaptación.

2.- La interacción organismo - entorno es un elemento indivisible de cualquier ajuste creativo funcional o no, la experiencia depresiva y la persona no puede comprenderse sin el entorno en el que se manifiesta. La frontera de contacto es un elemento integrador de este concepto, por tanto, el desajuste o interrupción en este punto de aproximación puede derivar en diversas disfuncionalidades, una de ellas, la experiencia depresiva. Estar atentos y pendientes de estas interrupciones es una de las labores de la terapia gestalt.

3.- Formas y modos de flexión ante el contacto como formas rígidas y que, en las experiencias depresivas, se observan las siguientes: la confluencia, la retroflexión, los introyectos e ideas que derivan en un pobre concepto del Sí Mismo y el Self no logra llegar al contacto de una manera funcional.

Aunque la persona con una experiencia depresiva desea entrar en contacto y lo anhela, al mismo tiempo, lo rechaza porque no se siente merecedor de obtenerlo y con un gran temor a perderlo.

Las dolencias corporales y sus dolores son parte de la experiencia ansiosa que de pronto forman figura en el momento de la consulta que incluye esta sensación de malestar y de no poder vivir espontáneamente en lo que requiere y necesita.

4.- Dentro del modelo de las polaridades que Fritz Perls propone, puede explicarse esta experiencia depresiva como una de esas polaridades. La persona solo es capaz de tocar su vulnerabilidad Sí Mismo.

5.- El ciclo de necesidades y la autorregulación organísmica

La experiencia depresiva da forma a los desalientos, la queja, el desear llegar al contacto, pero no encuentra un entorno seguro que lo sostenga. Las sensaciones, los sentimientos y las críticas dominan los cuadros de las experiencias depresivas, para tomar la terminología gestáltica, el Self ello invade la experiencia sensorial y se ajuste mediante el Self personalidad sin lograr ir hacia el entorno de una forma más sana y funcional.

Lo que se interrumpe es la excitación, la sensación y motivación del organismo para cubrir el ciclo y lograr el contacto en la frontera en el “aquí y ahora” y lograr nutrirse de los campos relacionales de los que sí dispone en el ahora. La configuración de ese campo es el fondo de la experiencia depresiva y la atención se dirige hacia la integralidad de la experiencia.

6.- La distinción de la funcionalidad del Self nos pone en la tesitura de reconocer qué tipo de depresión está en juego en el paciente que nos consulta.

Una aproximación gestáltica la experiencia depresiva:

Para tener clara la mirada depresiva en la consulta se requieren ciertas condiciones por parte del terapeuta para centrar su acompañamiento y desarrollo del vínculo terapéutico.

1. La experiencia depresiva se percibe mediante la observación fenomenológica en todo momento sin perderse en la narrativa y la queja, mostrar una gran destreza para estar presente e indagar al mismo tiempo la experiencia de la persona que se encuentra en el campo terapéutico. En los encuentros que están tomando lugar entre el terapeuta y el paciente. 
2. Las perturbaciones en la frontera de contacto son parte el modelo que rige a la teoría de la Gestalt en estos aspectos. La ausencia del contacto es una de las alteraciones que se muestra en las personas depresivas.

No pueden ir hacia el contacto lo anhelan, pero se ausentan, se interrumpen. 

En mi experiencia clínica y para explicarlo de manera teórica lo he podido conceptualizar de la siguiente manera en términos de la funcionalidad del Self:

El Self personalidad está en pleno funcionamiento invadido por las sensaciones del Self Ello que impide pasar el puente que lleva hacia el crecimiento en el Self Yo. 

1. La actualización de la experiencia depresiva en el ahora en el tiempo de la consulta. Al centrarse en la conciencia del “aquí y ahora” somos activos espectadores de cómo las personas se debaten para no entrar en contacto con sus sensaciones, interrupciones de contacto, su dificultad para formar figuras y cómo sus ajustes creativos no le dan satisfacción. 
2. La experiencia principio y fin de la experiencia en la Terapia Gestalt es un artículo que dejo en la bibliografía y en el que hablo sobre la importancia de las vivencias y formas de aplicación de los conceptos.
3. Cuál es la funcionalidad de las sensaciones y sentimientos en la experiencia depresiva, trabajar sobre los aspectos de la tristeza, la retroflexión del enojo, el cuerpo como depositario de la ira, la ambivalencia en los procesos depresivos, en fin, una gran cantidad de significados entran están presentes, pero que, aun no se han llevado a la conciencia del Sí Mismo, simplemente se experimentan.
4. Focalizar el presente en todo momento, esas emociones no han sido atendidas ni entendidas por la persona que se encuentra viviendo una experiencia depresiva.

¿Cómo lo hacemos?

Mediante la atención sostenida y entrar en contacto con ellas, y desde ahí, comprender su funcionalidad en sus campos relacionales, o bien, cómo le impiden mejores adaptaciones.

Explicado desde la Gestalt:

Transitar junto con el paciente a través de la atención y la fenomenología que se logre darse cuenta, que entre en conciencia y logre en el proceso terapéutico formas mejores figuras, más luminosas y nítidas de acuerdo a sus intereses y necesidades y que distinga que elementos del campo está dispuesto a aceptar y cuáles a rechazar. 

Cómo puede vivir en el presente y vivificar la funcionalidad del Self en sus tres funciones: ello, personalidad y la del Yo.

Trabajo terapéutico en la experiencia depresiva en Terapia Gestalt

Nuestra mirada está en un trabajo paciente, integrador, en el diálogo gestáltico, la fenomenología, la indagación para seguir esta danza de contactos, interrupciones, retroflexión, proyección, culpa, minusvalía, vergüenza y otros elementos integradores en este acercamiento a las vivencias depresivas.

“Una persona deprimida se para a través de la retroflexión antes de que la acción pueda llevar a un contacto” (Gianni Francesetti)

Algunos puntos de consideración en la intervención gestáltica:

- Validar la experiencia del otro.

- Reconocer las interrupciones de contacto en los diferentes     campos relacionales y en el encuentro terapéutico.

- Cómo se presenta la ausencia de contacto en la relación con el terapeuta.

- Llevar el “darse cuenta” en sus maneras de relacionarse y cómo se interrumpe.

- Reestablecer el experimentar las sensaciones sin censura, sin desaprobación.

- El terapeuta puede experimentar el desear generar cambios en el paciente y su experiencia y eso lo lleva a experimentar angustia, lo más seguro, es que la persona aún no esté lista para establecer nuevos ajustes creativos. 

- Nuestra labor es sostener el dolor y el sufrimiento en el campo hasta que se llegue al contacto tan anhelado.

- El darse cuenta y la indagación son elementos cruciales en estas experiencias.

- Estar atentos a la resonancia terapéutica que nos presenta la experiencia depresiva del otro en el ahora.

Para concluir:

El terapeuta al crear el campo con el otro en la cualidad depresiva, requiere expresar y darse cuenta cómo su estilo terapéutico puede favorecer el crecimiento o entorpecer la toma de conciencia y mostrar las interrupciones ante la ansiedad que pudiera generar este tipo de maneras de vivir. Recordemos que convertirse en Terapeuta Gestalt requiere de una formación.

Bibliografía

1.- Cameron, Norman. (2000). Desarrollo y Psicopatología de la Personalidad. Un enfoque dinámico. Edit. Trillas. Sexta reimpresión.

2.- Francesetti, G. Gecele, M. Roubal, J. (2013) Terapia Gestalt en la práctica clínica. De la psicopatología a la estética del contacto. Los libros del C.T.P

3.- Giorgana, Ana (2021). Las Habilidades del Terapeuta Gestalt. https://institutocedes.com/blog/habilidades-del-terapeuta-gestalt 

 4.- Giorgana, Ana (2022). Los 12 puntos de la Terapia Gestalt Aplicada. https://institutocedes.com/blog/los-12-puntos-de-la-terapia-gestalt-aplicada

5.- Giorgana, Ana (2022). La experiencia: principio y fin de la Terapia Gestalt. https://institutocedes.com/blog/la-experiencia-principio-y-fin-de-la-terapia-gestalt-aplicada