El Self en la Terapia Gestalt Aplicada

El Self es uno de los conceptos fundamentales en la Terapia Gestalt. Para Jean Marie Robine, el Self es la función de la experiencia que y el generador del ajuste creativo, lo define como el artesano.

Un artesano es la persona que hace trabajos únicos y que realiza piezas originales. El Self desde esta definición de Robine es aquella función de la experiencia que realiza ajustes creativos únicos y originales en la frontera de contacto en un campo relacional en el presente.

El Self no es una estructura en la Terapia Gestalt

El concepto del Self tiene diferentes connotaciones de acuerdo al modelo conceptual en el que nos centremos. Para la Terapia Gestalt no es una estructura o un componente de la personalidad que tiene solidez más o menos fija que estructura el carácter de la persona.

El Self en la Terapia Gestalt se comprende como una función del contacto, de los ajustes creativos, el artesano como apunta Robine, de tal manera que requiere como todo obrero de diversos elementos para llevarlo a cabo sus labores de contacto.

El Self es un proceso

Este constructo en la Terapia Gestalt se reconoce como aquél artesano cuya labor está orientada al proceso de contacto en el presente y realizando ajustes creativos en la experiencia que es dinámica y cambia momento a momento en sus procesos de contactar.

La experiencia y la vida son actividades dinámicas y la forma cómo se van viviendo en la existencia la realiza el Self. No existe una traducción en el español sobre el concepto lo miramos como el “Sí Mismo”. 

En mi experiencia he podido constatar que “somos nosotros mismos viviendo, experimentando, significando y realizando los procesos que para la Terapia Gestalt se reconocen como el contacto. (Ana Giorgana, 2022)

La secuencia del contacto en el ciclo de la experiencia o de contacto

La relación organismo-entorno es indivisible y esta interacción forma un campo de experiencia en el presente y solo en ese instante. Este campo inmediato es en el que vivimos y estamos aquí y ahora.

Contactar con las necesidades del campo inmediato en relación con el organismo es la función más apremiante del Self. Para ello, podemos plantearnos algunas preguntas:

¿Qué requiere el campo? 

¿Qué necesita el organismo? 

¿Cómo lo contacta? 

¿Lo percibe o simplemente lo niega? 

¿No lo comprende y existe caos? 

¿Se aproxima a él con juicios y críticas? 

¿Cuál es la cualidad de ese contacto?

Estas interrogantes son una guía para los terapeutas para que puedan ir comprendiendo esta funcionalidad en la práctica clínica.

Figuras y Formas: su construcción y destrucción en la experiencia

El proceso de contacto en la experiencia en una construcción de figuras y fondo, el fondo es figura y la figura es fondo.

El Self se despliega en la experiencia y se inicia el proceso que es temporal en tanto se abra otra experiencia y se reconoce como la construcción-destrucción de la Gestalt. 

Las herramientas de este artesano de los ajustes creativos como lo plantea Robine, son diversos momentos de esa experiencia que se reconocen como las funciones del Self.

Las tres funciones del Self

1.- Self en función del ello:

Se refiere a una función organísmica que tiene como depositario al cuerpo se activa en el momento en el que surge una necesidad, y se reconoce como la excitación que sostiene la premura de la necesidad. Se expresa en forma de sensaciones, deseos, ganas o incomodidad, también pueden surgir emociones o sentimientos que alertan la emergencia de esta modalidad de la función del Self.

2.- La función personalidad.

El modo personalidad es un reconocimiento al aprendizaje, a lo conocido y aprendido. Así soy Yo, así es como Yo pienso, de esta manera son las cosas y las percepciones. Una apreciación de la situación de acuerdo al conocimiento verdadero o no, es la forma de percepción del individuo en ese momento preciso.

En esta modalidad se encuentran las fronteras en las que es posible darnos cuenta de la diferencia entre el mundo y Yo, entre el otro y los otros y Yo.

El concepto que tengo de Mí Mismo está centrado en este modo de operar, de tal manera, que se pueden observar a través de las palabras que las personas hacen para describirse. Son calificativos que la persona cree que es o lo definen y que rigidizan la experiencia.

3.- Función Yo

Los dos modos anteriores del Self ello y personalidad van dando forma a la secuencia de contacto y a partir de este momento se rechaza o se acepta aquello que es novedoso, que llama la atención o bien, que es rechazada para el contacto inmediato.

Esta apropiación de la experiencia se lleva a cabo en la frontera de contacto y se asimila, se nutre del campo en la realidad inmediata en el presente o bien, se puede llevar a un contacto pobre sin distinguir de qué puede beneficiarse y también es probable que se rechace todo lo que existe en el campo.

El contacto con el entorno también está en función de las capacidades o habilidades del contacto.

Así, por ejemplo, sí durante años he estado sujeto a un medio ambiente crítico acerca de mi comportamiento y mi manera de ser, seguramente, mi mejor modo de adaptabilidad estará centrado en el Self personalidad. El concepto de Mi Mismo se encuentra perturbado por las etiquetas con las que fue construida mi personalidad, eso es lo único que conozco. 

Modos de evitación y flexiones del contacto

El Self Yo no logra realizar su función de manera espontánea y funcional. En términos teóricos se dice que existe una ausencia en la frontera de contacto.

Los conceptos gestálticos proponen una serie de mecanismos que están presentes en el proceso de contacto y que pueden tornarse a favor del crecimiento o evitación del miso proceso dinámico de construcción y destrucción de las figuras en el campo presente y que prácticamente se distinguen cinco modalidades, que se explican a continuación:

La confluencia: 

La confluencia se explica de manera conceptual como una ausencia del límite en la frontera de contacto en la interacción entre el entorno y el organismo. El campo forma parte del Self y el Sí Mismo son una totalidad indiferenciada.

Es la incapacidad de percibir la diferencia entre el Yo y el Tú. El todo es un “nosotros”, las necesidades del ambiente son las mías. Una de las grandes frustraciones de este modo de vivir es en el instante en que la persona logra “darse cuenta” que no siempre los intereses del campo no corresponden a las de esa persona.

Vivir desde la confluencia genera conductas disfuncionales porque se niega y no se toleran las diferencias de los otros. Convertirse en un individuo representa riesgos en estos ambientes confluentes.

En las familias con este modo de operar esperan que todos los miembros del grupo cuenten con los mismos intereses, valores, opiniones y formas de comportarse son únicos y existe una exigencia social a ser de esa manera.

Establecer el contacto desde este modo de operar implica renunciar a la propia autonomía. La dependencia al medio amiente impide el crecimiento personal y vivir como un individuo capaz de crecer y confiar en Sí Mismo.

La retroflexión:

Este mecanismo está sujeto a una serie de introyectos que han tornado destructivos para el Sí Mismo. La persona no puede avanzar debido a creencias, aprendizajes y mandatos aprendidos y sufre porque ya no desea ser obediente pero aún no sabe cómo integrarse de una manera diferente, no entiende cómo hacer un nuevo ajuste creativo.

La energía de la retroflexión queda detenida y es volcada hacia la propia persona. La culpa y la vergüenza son elementos que se integran en la experiencia del momento presente.

La retroflexión es una consecuencia de los modelos educativos y de las formas de crianza que se recibieron en el proceso de convertirse en persona y con los aprendizajes a través del proceso educativo al que hemos sido expuestos desde niños. Ese es el fondo que sostiene la figura de la retroflexión.

Los “deberías y los tener que” como una obligación ocupan el lugar de la narrativa de las personas que constantemente retroflectan. Al ser una energía que se reprime o suprime esta energía se vuelve al cuerpo y las somatizaciones aparecen como síntomas corporales: contracturas, trastornos de sueño, anorexias, bulimias, gastritis, colitis, entre otros.

La proyección:

Todos son responsables de lo que a mí me sucede. El medio y el entorno están en contra mía. El ambiente es amenazante. Yo estoy libre de toda implicación, el medio ambiente es el eje de mis dolencias.

El individuo se convierte en una víctima del ambiente. Se percibe a Sí Mismo alejado del ambiente, pero afectado por este. Un modo de relación que en la consulta requiere de un continuo de conciencia de manera consistente.

La introyección:

El proceso educativo es un acto de introyección en todos los sentidos. Yo existo en cuanto tú me confirmas. Aquí se encuentra la socialización. Todo proceso de socialización está destinado a introyectos de acuerdo a la cultura y época en la que el individuo vive. Abarca todos los niveles del organismo en su campo relacional.

Los introyectos son creencias, valores, aprendizajes, estilos de crianza y formas y maneras en las que nos fue transmitida desde nuestra más tierna infancia. Es la transmisión de la cultura de la cual estamos sujetos.

No siempre estas creencias son edificantes, por el contrario, algunas perturban a la persona en su desarrollo y crecimiento, lo detienen, por ello, es necesario desafiar esos introyectos que impiden en el ahora la realización personal.

No todos los introyectos nos impiden avanzar, pero esas creencias no son las que llevan a la consulta a la terapia. Necesitamos centrar la atención en aquellos introyectos que perturban la funcionalidad del Self.

En conclusión, el Self y su proceso de contacto es una de las metas de la Terapia Gestalt Aplicada y es dónde todo terapeuta que se ha formado en este modelo requiere comprender cabalmente para enfocar sus intervenciones en el darse cuenta, abrir la conciencia del presente y reestablecer las funciones del Self.

Bibliografía

1.- Giorgana, Ana (2021) El Self una función integradora de la experiencia.https://anagiorgana.com/el-Self/

2.- Robine, Jean Marie. El Self en la Terapia Gestalt. https://psicologos.mx/el-Self-en-la-terapia-gestalt.php 

4.- Giorgana, Ana (2022). Los 12 puntos de la Terapia Gestalt Aplicada. https://institutocedes.com/blog/los-12-puntos-de-la-terapia-gestalt-aplicada